Un equipo de profesionales te acompañará en todas las fases del proyecto. La primera entrevista es fundamental para comprender e interpretar lo mejor posible tus necesidades. Una visita al lugar para evaluar cuáles son las mejores soluciones teniendo en cuenta todos los aspectos arquitectónicos y tecnológicos. Por último, el proyecto: un estudio detallado con plano, secciones y alzados que se completa con renders fotorrealistas claros y exhaustivos.

Nuestros portabotellas están fabricados por maestros artesanos italianos que trabajan la madera, el metal, la piel y el plexiglás de una manera exclusiva siguiendo el diseño que mejor refleja tu pasión por el vino. No nos cansamos de las novedades, por eso siempre buscamos nuevos acabados y materiales para que tu sala de vino refrigerada a medida sea única.

Solo después de un detallado análisis del espacio dedicado a la sala del vino es cuando diseñamos el sistema de refrigeración ideal que, según la situación, podrá controlar solo la temperatura o también la humedad.

Nuestras paredes divisorias son de doble acristalamiento con corte térmico, perfiles de aluminio minimalistas y juntas de alta resistencia específicas para salas de vino. Las puertas y los módulos de vidrio se pueden diseñar de forma lineal o curva. Los vidrios, en función del entorno, presentan un tratamiento especial para gestionar lo mejor posible la luz directa.

La iluminación es un aspecto que muchas veces se pasa por alto, pero es muy importante para la conservación ideal del vino. Se estudia y se propone una iluminación LED regulable ya en la fase de diseño, estableciendo la posición óptima de la luz, así como la posición de las fuentes de alimentación y los reguladores de intensidad necesarios.

Además de crear salas de vino refrigeradas, prestamos un servicio que comprende todas las situaciones que requieren un sistema específico de refrigeración. Diseñamos salas climatizadas a medida y vitrinas de exposición para puros, pieles, libros antiguos, obras de arte, carnes, caviar y quesos.